Este 2019 te has propuesto cuidar tu piel como se merece y nosotras no podemos alegrarnos más. Eso sí, antes de ponerte a gastarte el sueldo del mes en cremas, conviene que revises algunas cosas que puede que estés haciendo mal y que están estropeando tu piel. ¿Reconoces que estás habituada a hacer alguna de las siguientes cosas? Aún estás a tiempo de parar.
- Irte a la cama sin desmaquillar.Quien no se haya ido a la cama sin desmaquillar en alguna ocasión que tire la primera piedra. Sin embargo, limpiar en profundidad el rostro es la base de cualquier tratamiento para la piel. Suprimirlo no solo acelera el envejecimiento y favorece la aparición de arrugas prematuras, sino que contribuye a la falta de luminosidad. El momento ideal para hacerlo es la noche, cuando, además de eliminar los residuos del maquillaje, también retiraremos los restos de polución y los propios desechos celulares. Con el gel limpiador osmótico de LluchKare podrás eliminar cualquier resto de maquillaje (incluso el waterproof) e hidratarás tu piel a la vez que combates los signos del envejecimiento.
- Beber demasiado café.Para muchas, tomar un café nada más despertarnos es un hábito tan arraigado como vestirnos o cepillarnos los dientes. Además, consumir cafeína con moderación, debido a sus propiedades antioxidantes, puede ser saludable. Sin embargo, cuando este consumo es excesivo estamos haciendo que nuestro hígado trabaje más y que, por lo tanto, aumenten las toxinas. Por otra parte, al tratarse de una bebida laxante y diurética, favorece la deshidratación, la cual se traduce en una pérdida de colágeno e inflamación. Por si fuera poco, el café puede desencadenar brotes de acné y se relaciona con el envejecimiento prematuro. ¿Te hemos dado suficientes motivos para reducir su consumo?
- Ponerte demasiada crema hidratante.Si un error muy frecuente entre mujeres jóvenes es prescindir de la crema hidratante (sobre todo entre aquellas que tienen la piel grasa), otro igual de grave es creer que por aplicar mucha cantidad estamos cuidando mejor nuestra piel. Nada más lejos de la realidad: cuando ponemos más crema de la que nuestra piel necesita estamos contribuyendo a que los poros se taponen y la piel no pueda respirar como debería. Ten siempre en cuenta que, en el cuidado de la piel, tan malo es pasarse como quedarse corta.
- Tocarte la cara.Párate a pensarlo: las manos están en contacto permanente con superficies sucias y llenas de bacterias. Por eso, si no te las lavas con frecuencia y tienes la costumbre de tocarte la cara, debes saber que estás aportando a tu rostro una considerable cantidad de suciedad que hará que tus poros se obstruyan. Esto puede ocasionar brotes de acné y empeorar condiciones como la dermatitis de contacto o el herpes. ¡Deja de hacerlo ya!
- No dormir las horas suficientes.¿Sabías que, durante la noche, mientras dormimos, la renovación celular de nuestra piel es mucho mayor que durante el día? Por este motivo, dormir pocas horas, además de favorecer la aparición de ojeras, también contribuye al envejecimiento de la piel. Trata de dormir entre 7 y 8 horas al día y estarás dándole a tu piel el mejor tratamiento antiedad.